En 1875, la
madrileña carretera de Francia paso a llamarse calle de Bravo Murillo, en el tramo
desde Cuatro Caminos hasta Estrecho, y a partir de ese punto se llamó
O’Donnell, pero a los pocos años toda la calle se llamó de Bravo Murillo, desde
la glorieta de Quevedo hasta la Plaza de Castilla.
Calle Bravo Murillo, 2013. Foto: SCB |
En Bravo Murillo destaca el popular Mercado de Maravillas, que ocupa el solar de lo que antes era el colegio de Nuestra Señora de las Maravillas, destruido en 1931. El mercado fue proyectado por Pedro Muguruza en 1942, junto a otros de Madrid, como los de las calles Ibiza y Santa María de la Cabeza. En el barrio de Tetuán, junto a Bravo Murillo, estaba la parroquia de Nuestra Señora de las Victorias, que en la actualidad es la Plaza de la Remonta.
El eje de
Bravo Murillo se convirtió en una de las arterias fundamentales de la ciudad,
por ser núcleo de comunicaciones y de un floreciente comercio. La línea
divisoria entre los municipios de Madrid (Cuatro Caminos) y Tetuán desapareció
el 5 de junio de 1948, igual que ocurrió con otros municipios de la zona, y en
1955 se convirtió en distrito.
La calle de
Bravo Murillo se ha caracterizado durante años por contar con varios cines
(Cristal, Condado, Versalles, Lido) de entre los que destaca el edificio del
cine Europa, obra vanguardista de 1928 a cargo de Luis Gutiérrez Soto. Hoy día
esta calle es una de las que registran mayor concentración de establecimientos
comerciales, especialmente zapaterías y tiendas de ropa.
No hay comentarios:
Publicar un comentario