Torres Kio o Puerta de Europa, en plaza Castilla |
Estos dos edificios emblemáticos del
Madrid moderno se construyeron entre 1989 y 1996, según el diseño de los
arquitectos estadounidenses Philip Johnson y John Burgee. Fueron sin duda el
proyecto arquitectónico más polémico de los años 90. Las dificultades
financieras por las que atravesó el grupo KIO dieron al traste con el
establecimiento allí de su sede. El grupo kuwaití cortó sus relaciones
comerciales con España tras el fraude multimillonario de quien fue su hombre
de confianza en el país, el financiero Javier de la Rosa, que fue condenado a
más de 20 años de cárcel. Las torres permanecieron durante mucho tiempo sin
actividad y con su estructura a medio terminar.
Arquitectura innovadora
Arquitectura innovadora
Las Torres
Kio llaman la atención tanto por sus 114 metros en 26 plantas,
como por su desafío a las leyes gravitatorias. Se idearon de un modo que obligó
a los arquitectos a replantearse todos los detalles constructivos, desde los
huecos de las ventanas, que nunca
podrían ser abatibles, hasta las conexiones más elementales entre la estructura
y su cerramiento.
El lugar
ideal para ser apreciadas en su totalidad es el propio paseo de la Castellana, ya que la tensión que provoca en el espectador la falta de
verticalidad queda compensada por una exacta simetría. Su inclinación de 15
grados de alzado se consiguió a través de una estructura de acero completada con aluminio. El revestimiento exterior es de cristal reflectante de color negro.
La
construcción de las torres formó parte de un plan urbanístico de la Plaza de
Castilla que incluyó un intercambiador de transportes
subterráneo. Una de las torres fue adquirida por Caja Madrid (Bankia) y la otra
por Realia. Como
curiosidad, las Torres Kio sirvieron de escenario para la película El día de la bestia, del director
bilbaíno Alex de la Iglesia. En ellas se rodó el desenlace de la película.
Entre 2008
y 2009 se instaló en el centro de la
plaza, frente a las torres, una columna o
poste de 93 metros de altura y 572 toneladas de peso, formada por placas
metálicas doradas, diseñada por el arquitecto Santiago Calatrava. Unos metros
más atrás, sobre la boca del túnel subterráneo que atraviesa la plaza, se
encuentra el monumento en piedra a José Calvo Sotelo, político asesinado en 1936. Este monumento, según proyecto del escultor Carlos
Ferreira y del arquitecto Manuel Manzano Monís, se inauguró en 1960 en el
centro de la plaza de Castilla, aunque fue trasladado a su ubicación actual en
1992, durante la remodelación de este lugar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario